En memoria de los olvidados

Autor: Daniel Cerna.

Es extraño, además de nada recomendable, redactar un texto cuyo título sea un oxímoron. Sin embargo, uno comienza a agarrarles cariño al darse cuenta que impregnan la vida cotidiana, junto a una serie de aporías y contradicciones –igual y no muy lógicas– con bastante sentido. Por ejemplo, uno aprende a probar con los ojos al decir “¿ya viste cómo sabe?”; también se sienten vacíos, como el aquel ubicado en el pecho después de una mala noticia; a veces, estos sinsentido nos ayudan a expresar mejor cómo nos sentimos, como cuando uno dice que está “bien mal”. Leer más