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Lo importante que es escuchar nada 

En 1952 el compositor experimental John Cage compuso una de sus obras más famosas y que, hasta la fecha aun da mucho de que hablar. Su obra se llama 4’33’’, una pieza que para la sorpresa de nadie dura cuatro minutos con treinta y tres segundos constituidos completamente de silencio. Ya ve el lector porque es tan comentada esta pieza musical, el simple hecho de llamarlo una “pieza musical” puede ser controversial. Aunque indudablemente el silencio puede ser parte importante de cualquier canción o cualquier otro arte auditivo o audiovisual, es realmente inusual que una obra se componga solo silencio.

Pero la historia de esta canción solo se pone más interesante y, al mismo tiempo, más extraña. 10 años después de la muerte de John Cage, surgió una canción interpretada por la banda “The Planets” que se titula “A minute of silence” (un minuto de silencio) y es exactamente lo que dice el nombre. Lo interesante aquí es que el abogado de Cage, que maneja o por lo menos manejaba en la época los derechos de autor sus canciones, demando a la banda por plagio.

Quiero que el lector tenga un segundo para que comprenda realmente lo que leyó en el anterior párrafo. Un abogado demanda a una banda por lanzar una canción de un minuto donde no se escucha ningún instrumento solo porque su cliente, ya muerto, tiene otra canción de 4 minutos donde tampoco se escucha ningún instrumento. Y gano la demanda; más o menos. Al final Mike Batt (compositor de The planets) tuvo que pagar fuera de juicio una suma de seis dígitos que nunca se revelo.

Batt comentó que pagaba la suma por el respeto que le tiene a John Cage como artista; sin embargo, también recalcó que la suya era una mejor pieza de silencio porque fue capaz de expresar en un minuto lo que Cage tan solo pudo hacer en 4 minutos con 33 segundos.

Esta breve historia me hizo pensar ¿Qué tiene el silencio dentro de estas dos canciones que llama tanto la atención del público o le beben su aparente fama a la pelea legal? ¿es posible que alguna pieza de silencio exprese tanto que las personas realmente reciban algún mensaje?

La primera fuente a la que acudí fue a Merleau-Ponty. Para él, el silencio tiene una gran importancia dentro del significado de las oraciones cotidianas. Tanto así, que él pensaba que no existía mayor significado en las palabras, sino que, por el contrario, si una persona desea tener un entendimiento adecuado de lo que su interlocutor esta diciendo, es necesario que le preste atención a una serie de lenguaje no verbal, lo que él llama “silencio expresivo”.

Ahora bien, el problema es que Merleau-Ponty no separa el silencio y su expresividad del lenguaje verbal. Por lo que en un tiempo quise seguir por esta línea, pero nada de lo que leía terminaba de satisfacerme como una posible explicación.

Entonces ¿estas canciones no significan absolutamente nada? Tal vez sí, pero solo es el significado y la relevancia misma que los artistas le dan; las canciones en sí, literalmente, no dicen nada. Sin embargo, como buen arte, estas canciones deberían expresar algo de la sociedad y de la cultura que las volvió tan significativas (especialmente 4’33’’) y que van más allá de las explicaciones dadas por los artistas mismos. Defendería yo incluso que probablemente ellos mismos tampoco sabían que era exactamente.

Para intentar entender mejor el significado de estas canciones, me vi una presentación donde William Marx interpreto 4’33’’ y después de la interpretación había un video donde se captura la reacción del público, un público que, aunque tenían alguna idea de que era lo que iban a ver, no sabían que la presentación iba a ser completamente en silencio. Era de esperar que la gran mayoría de las reacciones iban a ser o bien “no entendí nada”; o bien “que hermosa pieza de arte”.

Sin embargo, una de las personas dijo algo que me dejo pensando; un señor ya mayor, casi empezando el video, dijo que un sentimiento de terror se apodero de él y le dieron ganas de reírse de forma histérica. Esta es, para mí, la reacción más honesta de todo el video y me hizo entender por qué estas canciones tuvieron la atención que han recibido.

Hasta entonces solo había pensado en el silencio como tal, sin embargo, el silencio dentro de este contexto es completamente diferente, aquí el silencio nos está dando una incongruencia a como pensamos sobre la música que nos habla directamente. El silencio es algo que, como sociedad, menospreciamos e intentamos evitar a toda costa y tenemos muchas formas de hacerlo desde audiolibros hasta esos video, series o películas que, aunque no nos interesen, ponemos de fondo con la intención de escuchar algo y no tener que lidiar con el silencio.

Entre estas herramientas que tenemos para combatir el silencio evidentemente se encuentra la música, pero aquí tenemos una pieza musical que nos esta obligando a escuchar eso de lo que tanto hemos estado corriendo. Tenemos una pieza musical que hace que nos enfrentemos directamente con lo que más nos incomoda en todo el mundo, nuestros pensamientos.

Cuando no tenemos nada que escuchar, nada en lo que poner nuestra atención así sea sin mucho esfuerzo, nos vemos obligados a enfrentarnos con nosotros mismos, esa es la razón por la que el señor del video decía sentir terror y la razón por la que había más personas en el público cuando empezó la pieza que cuando acabo.

Pero hasta aquí queda este escrito, no hay más que decir, ningún análisis profundo y ninguna verdad reveladora. Podría dedicarle varios párrafos a argumentar las virtudes que tiene el enfrentarse uno mismo con sus pensamientos, pero realmente todo lo anterior es tan solo una invitación al lector para que se arme de valor, escuche estas piezas, y tenga la dicha de enfrentarse a sí mismo.

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