Prosa poética o poesía en prosa,
¿qué más da?
Rimas, palabras que concuerdan, concatenación, entonación,
¿qué más da?
La poesía, rica en palabras,
en sentimientos, sola en recuerdos,
en deseos, es silencio.        
Silencio a gritos,
voces mudas que atropellan, que lloran,
que aman, que esperan.
Ceguera del vidente que no ve.
Visión del ciego que sí cree.

La poesía, es silencio del alma,
es el paso del tiempo para el amante,
es el peso de la agonía,
es confusión y armonía.
La poesía es el medio usado para un fin.
Es llegar desde lo más alto
a lo más bajo y es subir,
lentamente, desesperadamente,
amorosamente, hasta la mente.

La poesía, es silencio en el que escribe,
es ola revuelta en lo apacible
océano del alma, que no calma.
La poesía, es mi silencio
cuando te llamo, cuando te amo.
Es la forma pura de la esencia,
que aún sin tu presencia,
cubre mi soledad en la distancia,
pues me diste en la palabra un beso,
mientras ahorcabas a mi corazón con un lazo.
La poesía, es silencio,
tu silencio,
mi silencio.

Hoy

Hoy, querido amigo, estoy pensando en ti,
en tu voz, dulce y firme,
en tus ojos oscuros y profundos,
en tu pensamiento, abierto y eterno.
He pensado y pienso, tal vez,
alguna vez, seas, tan sólo un recuerdo.
Hoy, querido amigo, estoy pensando en ti,
lejano, pero tan cercano.

Amigo, ¿es acaso posible,
que tan sólo necesite, mirarte a los ojos
y sentir apoyo? ¿Ser personas,
ante nosotros mismos?
Sentarse en el suelo,
escribir un poema,
hablar en silencio y, al tiempo,
escuchar canciones
que nos lleven lejos?

Hoy, querido amigo, estoy pensando en ti,
eres fuego que taladra mis sentidos
y llena mi cerebro, y…
El solo pensarte, anima mi alma
y descubre en mí,
sensaciones increíbles, al ver,
que llegas…
Hoy, querido amigo, estoy pensando en ti.